El ex concejal y candidato a intendente Pablo Carrizo fue denunciado por su pareja este domingo por violencia familiar. El hecho sucedió el domingo por la tarde en el domicilio que ambos comparten. Ante la denuncia intervino la policía, se le ordenó restricción de contacto con la víctima de violencia, por lo que retiró sus pertenecías del hogar. La mujer cursa un embarazo de 3 meses de gestación.
Según un informe publicado por este medio el Juzgado de Río Cuarto recibió en 2017 más de 340 casos de violencia familiar por día.
Al poco tiempo de que esta denuncia tomara estado público, Carrizo, sin hacer ninguna referencia al episodio de violencia familiar, anunció en sus redes sociales que había denunciado penalmente a su pareja y a su padre por maltrato animal.
Este tipo de comportamientos por parte de los agresores se repite, tanto en casos de violencia familiar como en violencia sexual. Uno de los casos de mayor trascendencia es el de Thelma Fardín, quien denunció a Juan Darthes por acoso sexual. Ante la denuncia, el abusador realizó una contra denuncia, lo mismo que hizo con la denuncia anterior realizada por la actriz Calu Rivero. Rivero fue la primera en realizar una denuncia pública en su contra, que no llevo a Tribunales porque “no creía en la Justicia argentina”. Darthés en cambio la denunció penalmente por «daños y perjuicios», pero en medio de la nueva denuncia realizada por Fardín ni si quiera asistió al juicio. La denuncia de Rivero animó a Fardín, y la de Fardín a Anita Jo y Natalia Juncos.
Desde el movimiento #YoTeCreoHermana se fomenta la importancia de creerle a las víctimas de violencia, ya que sólo el 0.1% de los casos denunciados son falsos. Cuando hay una mujer en situación de violencia a la que se pone en duda su denuncia, el efecto es de retracción por parte de las mismas, lo mismo que sucede cuando no se le cree a los niños o niñas.
